
Debido a los avances y cada vez un uso más frecuente de las nuevas tecnologías, las estafas, fraudes y ciberestafas a personas mayores son una preocupación creciente. Estas personas suelen ser más vulnerables a estos delitos debido a factores como la soledad, la falta de conocimiento de nuevas tecnologías o simplemente la confianza.
Por lo general, no están tan familiarizadas con las tecnologías más recientes y tienen más dificultades para entender los riesgos y peligros de Internet. Además, al tener menos experiencia en línea, es más probable que cometan errores que los estafadores pueden aprovechar. También suelen tener un acceso limitado a recursos de apoyo y les cuesta más encontrar información confiable o asesoramiento sobre cómo protegerse en línea.
Algunos de los tipos más comunes de estafas que suelen afectar a personas mayores:
1. Estafas telefónicas o por internet- Sitios webs fraudulentos (Phishing)
Los estafadores llaman por teléfono o envían correos electrónicos o mensajes de texto haciéndose pasar por instituciones legítimas, como bancos, empresas de servicios o incluso autoridades como la Agencia Tributaria.
Se trata de uno de los intentos de ciberestafa más populares y se pone en marcha con la recepción de un correo electrónico y que comunica a la persona que, por alguna razón, debe actualizar sus datos.
El mensaje contiene un enlace que parece legítimo, pero al hacer clic en él, se accede a una página falsa que imita una auténtica. Al introducir los datos en este sitio, se están entregando de forma involuntaria, lo que permite a los estafadores acceder a las cuentas de la víctima para robar dinero o utilizar la información para actividades ilegales.
Piden información personal, como números de cuenta, contraseñas, o incluso dinero para «resolver problemas» o «evitar sanciones».
2. Falsos sorteos o premios
Las personas mayores reciben una llamada o mensaje informándoles de que han ganado un premio, pero deben pagar una cuota o proporcionar datos bancarios para reclamarlo.
Les dicen que han ganado un coche o una suma de dinero, pero primero tienen que hacer un pago inicial o compartir información financiera.
3. Fraudes de «servicios falsos»
Los timadores se hacen pasar por trabajadores de servicios públicos (como gas, electricidad, teléfono o agua) o incluso de empresas de reparación del hogar, y les cobran por servicios que nunca se prestan.
Los estafadores se presentan como técnicos de reparación del hogar, ofreciendo servicios innecesarios a precios muy elevados.
4. Estafas amorosas (Romance scams)
Los estafadores se hacen pasar por personas interesadas románticamente en la víctima, principalmente a través de redes sociales o sitios de citas en línea como chats. Luego, tras ganarse su confianza, piden dinero por diversas razones (problemas médicos, viaje, emergencia).
Delincuentes cibernéticos que crean perfiles falsos de personas atractivas y simpáticas, con el objetivo de establecer una relación sentimental
Después de meses de comunicación, el «pretendiente» solicita dinero para una emergencia o para poder visitar a la persona mayor.
Una vez logran ganarse la confianza de la persona y la tienen atrapada, creyendo tal vez que han encontrado a su «alma gemela», usan varias excusas bien elaboradas para pedirles dinero o información personal que luego utilizan en su propio beneficio.
5. Suplantación de identidad
Los delincuentes roban la identidad de una persona mayor, obteniendo sus datos personales y luego utilizando esa información para cometer fraudes, como abrir cuentas bancarias a su nombre o realizar compras fraudulentas.
Un ejemplo muy característico es obtener el número de seguridad social o datos bancarios para realizar transacciones no autorizadas.
6. Estafas de “inversiones” o esquemas piramidales
A menudo, los estafadores se aprovechan de la falta de conocimiento financiero de las personas mayores, presentándoles «oportunidades de inversión» de alto rendimiento y bajo riesgo, que en realidad son esquemas fraudulentos. El dinero que invierten las víctimas no se utiliza como les dicen, sino que se destina a pagar a otros inversionistas.
Promesas de altos rendimientos en productos financieros o propiedades que resultan no existir.
7. Estafas en el hogar o servicios falsos
Los delincuentes se presentan como reparadores o contratistas ofreciendo servicios de reparación, como arreglar el tejado, hacer mejoras en la vivienda, o realizar trabajos en el jardín, y después de hacer el trabajo, exigen una cantidad mucho mayor de lo pactado.
«Arreglar» una fuga de agua, reparar la caldera, la calefacción…… por un precio elevado sin que el trabajo realmente se haya hecho.
Consejos para prevenir fraudes y estafas
- Promover el aprendizaje básico sobre Internet y la seguridad en línea para que las personas mayores comprendan conceptos como el phishing, malware, sitios web fraudulentos, entre otros.
- Hablar con un familiar o amigo. Consultar con alguien de confianza antes de tomar decisiones financieras importantes.
- Desconfiar de las ofertas inesperadas. Si algo suena demasiado bueno para ser cierto, probablemente no lo sea.
- No compartir información personal por teléfono o internet. Nunca dar información como números de cuenta o contraseñas a desconocidos.
- Verificar siempre la identidad de la persona o empresa. Contactar directamente con las empresas o entidades oficiales si tienes dudas.
- Usar contraseñas fuertes y diferentes para cada cuenta: evitar contraseñas fáciles de adivinar o reutilizadas en distintos sitios.
- Tener cuidado al descargar archivos o hacer clic en enlaces de fuentes no confiables.
- Instalar y mantener actualizado el software de seguridad, como antivirus, antispyware y cortafuegos, en todos los dispositivos.
- Activar la autenticación en dos pasos: agregar una capa extra de protección al iniciar sesión en cuentas importantes
- Mantener actualizado el sistema operativo y las aplicaciones: las actualizaciones corrigen vulnerabilidades que los ciberdelincuentes podrían aprovechar
Si conoces a alguien que pudiera estar siendo víctima de estos fraudes, es fundamental informarle y ayudarle a tomar las medidas adecuadas.
¿Crees que has podido ser víctima de algunos de estos tipos de estafa ?
Busca ayuda en organizaciones o entidades especializadas en seguridad en línea para personas mayores También puedes denunciar estos hechos ante las autoridades (091, teléfono Policía Nacional) para prevenir que más personas sean afectadas.
La Policía Nacional en España desempeña un papel clave en la lucha contra la ciberdelincuencia. Esta institución tiene una unidad especializada llamada Unidad de Ciberdelincuencia, que se encarga de investigar y combatir los delitos que se cometen en el ámbito digital. Esta unidad trabaja en la prevención, detección y persecución de los delitos cibernéticos, protegiendo a la ciudadanía de los riesgos y amenazas que surgen en el entorno online.






